¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Pequeño Dale escriba una noticia?
Vientos que cruzan sobre nuestro territorio parecen arrastrar nubes negras; nubes de guerra, Ya conocidas por muchos de nosotros los hijos de la violencia política del 48. Solo que ahora Los incitadores son dos políticos de la misma cuna. Cualquier parecido con la actualidad no es coincidencia
Siglos de guerra, desde la independencia al día de hoy; con diferentes caras, la misma muerte y la misma destrucción, máscaras de guerra de todos los matices y con todos los motivos : la guerra de independencia, la de los mil días, la partidista y las que presenciamos hoy, contra el narcotráfico, contra las bandas criminales y sobre todo contra las guerrillas, hasta podrán mencionasen las luchas contra la corrupción, contra la parapolítica, y la más desconsoladora, la que vemos que protagonizan las barras bravas del futbol.
¿Cierto que llegar a casa, entre tantas guerras en Colombia es un milagro? Ni siquiera traumatizados llegamos, nos hemos acostumbrado tanto que si nos preguntan al llegar, como nos fue un simple “Bien “es lo normal.
No deberíamos ser como los antiguos becerros de las guerras pasadas que fueron toreados con diferentes trapos de diferentes colores
Pero esa costumbre de ser indiferentes debería ser total; de pleno corazón y plena conciencia y no parcial como es ahora, cuando gran parte; aun de los Colombianos, en corrillos y redes sociales tomamos bando en favor de uno y en contra de otro, de los dos que nos ofrecen( aquellos que personalmente no quiero mencionar) no deberíamos ser como los antiguos becerros de las guerras pasadas que fueron toreados con diferentes trapos de diferentes colores, claro que en esas épocas la ignorancia y la buena fe hoy podrían señalarse como atenuantes al aporte estúpido de un pueblo engañado, pero hoy es inaceptable que los Colombianos todos o la gran mayoría creamos en uno u otro, sin ser testigos directos, solo testigos de oídas incitados por parte de los medios manipuladores. QUE TRISTEZA QUE NOS MANTENGAN DIVIDIDOS LAS MENTIRAS PARTIDARIAS.
El pequeño Dale