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Un paseo otoñal

15/09/2009 22:50 0 Comentarios Lectura: ( palabras)

Hoy mi paseo se volvió melancólico en medio de nubes grises que vienen del mar y callejeo con la humedad pegada en la piel, y la mirada perdida en un infinito y ajeno mundo

Hoy mi paseo se volvió melancólico en medio de nubes grises que vienen del mar y callejeo con la

humedad pegada en la piel, y la mirada perdida en un infinito y ajeno mundo.

Las calles, húmedas y pegajosas, despiden un familiar olor cargante a asfalto y suciedad y las farolas se

yerguen ufanas en el aire enrarecido del final del verano.

El mundo llora quejumbroso y sus lágrimas se confunden en la neblina. Errante, deambulo por las calles

vacías escuchando sus gemidos y lloro también con él, me empapo.

No me dirijo hacia ningún lado, no soy de ninguna parte excepto de mí misma, sólo invento mil viajes a

ningún lugar mientras miro un tímida luna brillar redonda.

Luego la tortura de los instantes eternos, los ensueños caprichosos que se desvanecen en locos

frenesíes, las batallas perdidas y una ilusión otoñal que amanece en el horizonte y nos trae la dulce melancolía del otoño en sus colores.

Es el último paseo por la playa; arena mojada sobre la piel tostada y el rumor de las olas acariciando la brisa. Reflejos de nácar brumoso entre la espuma que rebosa sobre las rocas y un sol de atardecer que languidece. Sueño con otras orillas y me sumerjo en el paisaje sin gaviotas de las barcas abandonadas.

El cielo ha vuelto amarillas las rocas, el mar es ahora más azul que nunca y la noche avanza por el este bañándose en el agua aún despierta.

Más allá de la bahía una luz encendida contempla la escena desde el fondo del espigón y comienza a encenderse el cielo. Miles de puntitos rilan traviesos en sus órbitas. Ya el mar se va durmiendo y la brisa, medio dormida, acompaña con su placidez el sueño melancólico de su adagio.


Sobre esta noticia

Autor:
S.march (2 noticias)
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Tipo:
Reportaje
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