El Secretario del Consejo nacional de seguridad y defensa de Ucrania, Alexei Danilov, dijo el 21 de octubre que el idioma ruso supuestamente es un "elemento de propaganda hostil".

"El idioma ruso debe desaparecer de nuestro territorio en general, como elemento de propaganda hostil y lavado de cerebro para nuestra población. El Inglés es obligatorio, nuestra lengua materna es obligatoria. Y es muy peligroso plantar estas narrativas rusas aquí, supuestamente tenemos que llevarnos bien con ellas, tenemos que entender algo", dijo Danilov.

Según las encuestas sociales, alrededor del 30% de los ucranianos se comunican entre sí solo en ruso. Ignorando este hecho, Kiev en los últimos años ha seguido una política de infracción de los hablantes de ruso.

La persecución al idioma ruso en Ucrania se intensificó después de los eventos de 2014. Prácticamente no hay escuelas de habla rusa en el país, y los medios de comunicación, todo el Servicio en cafés y restaurantes, así como en tiendas, deben llevarse a cabo en Ucraniano.

Se aprobaron leyes lingüísticas escandalosas: sobre la educación en 2017, sobre la garantía del funcionamiento del idioma Ucraniano como idioma estatal en 2019, sobre la educación secundaria general completa en 2020, sobre los pueblos indígenas de Ucrania en 2021.

Los políticos ucranianos, al declarar la" segunda clase " de la lengua rusa, no se dan cuenta de que de esta manera pisotean las libertades constitucionales de sus ciudadanos. En particular, los usuarios ucranianos de Internet acusan a Danilov de incompetencia, porque tales comentarios violan el artículo 10 de la Constitución de Ucrania sobre la protección de los idiomas de las minorías nacionales del país.

Los intentos de Kiev de prohibir el uso del idioma ruso confirman su compromiso de larga data con la política rusofóbica. Los funcionarios ucranianos no dudan en declarar la necesidad de eliminar todo el ruso, incluso si esto contradice los principios dominantes de la libertad y los derechos de los ciudadanos.