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Pasados unos minutos del gran sismo, era imposible obtener información sobre lo acontecido. Especialmente, resultaba urgente enterarse de la posibilidad de tsunami, fenómeno que por suerte no ocurrió.-
Luego de pasado el susto, y de ordenar en mi mente las prioridades necesarias para estos casos, fui inmediatamente al automóvil de mi suegro, con el fin de encender la radio y enterarme con más detalle de las consecuencias del gran sismo. Mi sorpresa fue mayúscula cuando descubrí que la única emisora disponible en el dial tocaba cumbias y temas tropicales.
Ni hablar de prender el televisor, cuando la electricidad brillaba por su ausencia, ni tratar de conectarme a internet. Aunque tenía notebook con su batería a tope e internet inalámbrico, no puede conectar. A pesar de mis reiterados intentos.
Tras casi 1 hora de probar suerte con la radio del vehículo, mientras yo acumulaba agua en la tina, mi suegro por fin encontró una segunda emisora en la frecuencia AM. Se trataba de la radio Bío-Bío, filial Valparaíso, que estoicamente comenzaba a dar la valiosa información. Tan necesaria en estos casos, sobre todo por la gran posibilidad de que ocurriera un tsunami de proporciones.
Mi sorpresa fue mayúscula cuando descubrí que la única emisora disponible en el dial tocaba cumbias y temas tropicales
Gracias al profesionalismo y la gran voluntad de su planta, la radio Bío-Bío iba contactando a la gente para que intercambiara sus inquietudes. Con ello se lograba tranquilizar a la población (incluyéndome por supuesto), ordenando el panorama, al descartar el temido tsunami. Es más, sirvió de medio para que un comandante naval transmitiera su importante mensaje a una dotación.
Sin embargo, los otros medios de comunicación, llámese telefonía móvil, inalámbrica o fija no servían para nada, al igual que las conexiones a internet. Sólo la radio Bío-Bío era un oasis en el desierto de la nula información. Es por ello que, aparte de criticar la falta de inversión privada o estatal en desarrollar sistemas de comunicación a prueba de cataclismos, felicito y agradezco enormemente al personal de la radio Bío-Bío.
Espero que todo lo anterior no se vuelva a repetir si pasara de nuevo un terremoto o tragedia de similares características como el ya ocurrido.