2017 es un gran año para los catering de boda teniendo en cuenta que cada vez son más las parejas que buscan algo diferente más allá del tradicional banquete. Los servicios de catering se están reinventando y cada vez hay más demanda de servicios de comida y bebida que ofrecen diferentes experiencias a los invitados durante todo el evento, de principio a fin, desde el cocktail de bienvenida a la ya popularmente conocida “recena”.

Te mostramos algunas de las tendencias para este año:

Limonada fría para recibir a los invitados: la mayoría de las bodas tienen lugar en temporadas donde el calor aprieta. Un puesto de limonadas frías para recibir a los invitados será un detalle que te agradecerán muchísimo. Asegurate de que la limonada se sirve bien fría y en un puesto estéticamente acorde con el estilo de la boda.

Rincones temáticos: son cada vez más frecuentes en el cocktail de bienvenida. Y es que el cocktail está ganando protagonismo y quién sabe si llegará a tener incluso más protagonismo que el propio banquete. Son muchas ya las parejas que deciden celebrar su boda de una manera más informal y prefieren el formato cocktail y buffet en vez de sentarse a comer cada uno en una mesa. De esta manera, los invitados tienen la posibilidad de interactuar más fácilmente y es una opción mucho más económica, pero no por ello de menor calidad. De hecho los rincones gourmet son la última tendencia en las bodas, ofreciendo una amplia propuesta gastronómica donde los invitados pueden elegir lo que más les guste sin ceñirse a un menú cerrado. Tienes tantas opciones como quieras: puedes hacerle un homenaje a tu tierra con productos típicos de la región, o hacerlo más internacional con comidas del mundo como sushi o comida mejicana, o un rincón de tapas creativas. Tu proveedor de catering podrá asesorarte sobre los productos de temporada para que te puedas hacer una idea sobre qué opciones puedes elegir.

Bar de aperitivos dulces o salados: Sin duda es uno de los elementos que más furor está causando en las bodas. La libertad de elegir entre varias opciones, así como la decoración y el encanto con el que se presentan estos rincones son la clave de su éxito. El rey por excelencia es el Candy Bar, la mesa montada y decorada con golosinas, galletas, dulces variados, cupcakes, etc. Pero van tomando fuerza nuevas alternativas como el Popcorn Bar con palomítas de maíz, o el muro de donuts de diferentes colores y sabores para que eligan los invitados.

La “Recena” : La denominada “recena” se ha convertido en un must de cualquier boda. La idea principal es poder reponer fuerzas para poder seguir bailando y disfrutando de la boda., así que asegúrate de que no se sirve demasiado pronto o, de lo contrario, tu invitados en vez de reponer fuerzas se van a sentir empachados de comida y sin muchas ganas de moverse. Aquí lo ideal es servir en formato buffet una combinación de alimentos dulces y salados para complacer a todo tipo de paladares. Los alimentos deben ser fáciles de comer, que se puedan comer con la mano e ir con ellos a la pista de baile a continuar con la fiesta. La opción perfecta es la llamada finger food, la nueva tendencia de comer grandes platos en pequeñas porciones y de una manera práctica, como las pizzas de la foto servidas con un palo a modo de piruleta.  Algunas de las ideas que más éxito han tenido en las bodas son: puestos de hot dogs, barra libre de churros con chocolate, mini pizzas, buffet de cupcakes y bollería o la ya famosa fuente de chocolate donde puedes bañar trocitos de fruta o golosinas.