¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Redacción Ciencia escriba una noticia?
La empresa estadounidense SpaceX fracasó este miércoles en su intento de hacer aterrizar la primera sección de su cohete Falcon 9 sobre una plataforma en el océano Atlántico, después de haber logrado esta maniobra cuatro veces consecutivas.
No obstante, la segunda sección del cohete logró colocar en órbita un satélite de comunicación de la empresa francesa Eutelsat y otro de la firma ABS, con sede en las islas Bermudas.
El 27 de mayo, el primer piso del Falcon 9 había aterrizado por cuarta vez al retornar del espacio. SpaceX ya había logrado recuperarlo una vez sobre tierra firme, en Florida, y dos veces sobre su plataforma marina.
Pero el miércoles, el lanzador de 70 metros de altura se quebró y se incendió al llegar a la plataforma, según una video-transmisión en directo de SpaceX.
El director de SpaceX, Elon Musk, confirmó más tarde el fracaso del aterrizaje en Twitter.
Se trata de un "RUD = Rapid Unscheduled Disassembly", escribió Musk, usando una expresión de la jerga aeroespacial que significa la destrucción de la nave.
El cohete fue lanzado desde Cabo Cañaveral, en Florida, a las 10H29 locales (14H29 GMT) y los satélites fueron puestos en órbita 30 y 35 minutos más tarde.
Se trata del sexto lanzamiento de SpaceX desde el comienzo del año.
