Siempre hablamos de cómo mejorar España, de cómo hacer que funcione mejor. En este blog y, en el resto de medios, se habla de lo que deberíamos hacer o dejar de hacer. Pero la realidad es que nadie pone foco en lo que uno mismo debería hacer. Creo que el cambio empieza por uno mismo.

Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo. -Gandhi

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Hablamos de lo que hacen los demás, pero nunca de lo que no hacemos nosotros. Voy a mencionar otra vez esa palabra a la que somos alérgicos: responsabilidad. Ni el gobierno, ni la comunidad de vecinos, ni la Unión Europea... nosotros somos los responsables de lo que nos pasa, al menos en un 90%. Piensa que cualquier cosa que veas a tu alrededor en este momento no es más que un resultado de tus acciones anteriores. Nuestra salud es una resultado, nuestra cuenta bancaria es un resultado... casi todo lo que vemos a nuestro alrededor es un resultado de algo que hicimos tiempo atrás, quizá hace años.

Esta es la parte más divertida de la vida: el 10% restante. Hay un 10% de causas ajenas a nosotros que inciden directamente sobre nuestra vida. Son cosas que no podemos controlar. A veces ocurre... un 10% de las veces, concretamente. Son cosas que nos sobrevienen y no podemos hacer nada por evitarlo. Vidas que se van, otras que vienen, calamidades, fenómenos meteorológicos (que en parte algo tenemos que ver), coincidencias que no podíamos preveer. La vida no es un circuito estable, cerrado y seguro, es un camino de cabras y eso hace que el 10% de las cosas no dependan de nosotros.

Nuestro peor error es que nos preguntamos por qué nos ha pasado ese 10% de cosas e ignoramos el 90% que está en nuestra mano. No pasamos la vida intentando incidir sobre ese 10%, buscando soluciones en la religión, en la suerte, en todo tipo de esoterismos. Mientras, el 90% restante de causas que sí están en nuestra mano, van a la deriva, esperando alguna acción por nuestra parte.

Nos focalizamos en lo que no podemos cambiar e ignoramos lo que todavía podemos cambiar

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Tal vez sea hora de crear un nuevo paradigma de consciencia, tal vez sea hora de tomar acción. Si quieres un cambio en cualquier aspecto de tu vida empieza haciendo algo. No, no me hables de las propuestas de nuevo año. Empieza ahora, YA, en este momento.

Una acción, por pequeña que sea, vale más que mil ideas.

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Después de aceptar la urticante palabra"responsabilidad", podemos relajarnos. Porque el resto del monte es orégano. Si aceptamos que casi todo depende de nosotros, también estaremos otorgándonos la posibilidad de cambiarlo casi todo. Casi todo lo que vemos quedará en nuestra mano. Eso sí, no basta con desearlo, como decía el libro de Rhonda Byrne, sino que hay que añadir acción. Mucha acción. Hay que hacer y hacer. Empieza ahora. Repito. Empieza ahora. Emprende una acción antes de mañana a las once de la mañana.

Ese es el verdadero secreto de todo.

Por cierto, ¡Feliz Navidad!

La entrada Somos responsables del 90% de las cosas que nos ocurren aparece primero en Blog de Isaac.