Un hombre muy preocupado por que llevaba varios días sin defecar (deponer, cagar, etc.) acudió a la farmacia más próxima para poner remedio a su continencia, así que una vez contada su pena, el farmacéutico le dispensó un purgante rápido, con el consejo de que se lo tomara al llegar a casa.

El hombre tenía prisa, así que nada más salir a la puerta de la farmacia le pegó un trago al purgante y se marchó a su casa.

Dos manzanas después se cruza con un paisano que le pregunta la dirección de la farmacia, a lo que le responde: "siga la raya amarilla".

El chiste es muy viejo, lo cuenta mucha gente, no es verde, ni picante y es facilón, le pasa como a los escribidores, cuando no saben qué o cómo hacer, siguen la raya amarilla, es decir, van detrás de las cagadas que hacemos los demás.

Copia y haz lo que vieras a los demás, es un viejo proverbio chino que les ha ido muy bien a los japoneses

Se han dado cuenta?

si me cambio de sección, alguien se viene detrás, si hablo de camiones, siempre hay alguien que habla de camiones... menos mal que no se me dá por hablar de los chinos, que son mis favoritos.

Se lo dijo Ordos un día a Chávez, en La copia de Chávez copiar de otro no es bueno, pues si se equivoca el otro, uno también se equivoca y la caga.

Pero bueno, parece que la cosa no va mal, si supiéramos más de idiomas, hasta podíamos traducir lo que escriben otros y pasarlo por nuestro, lo malo que hasta eso no llegamos, vamos que nos falta un hervor.

Copiar si sabemos, ser originales ya es más difícil, como decía un viejo amigo: lo tuyo no es pensar, lo tuyo es hacer... kk

Escribir puede ser hasta divertido, si se sabe hacer... que se puede hacer mal, regular, bien y muy bien, lo de excelente se lo dejo a otros, sobre todo a los que me siguen copiando, es decir...

Usted que opina del color que le da el pulpo a las patatas?