Parece que las declaraciones del gobernador bonaerense Daniel Scioli sobre sus aspiraciones presidenciales han apresurado tiempos que no estaban previstos enfrentarlos ahora.

Si ha esto le sumamos la mala coyuntura economica que en la mañana de hoy ya ha hecho superar al dolar paralelo (en el mercado informal) los $ 6 pesos, las declaraciones de "no shock cambiario" -cuando el rio suena señal que agua trae-, la imputación al vicepresidente Amado Boudou del delito de enriquecimiento ilicito y ahora la caida en desgracia de los hermanos Shoklender la mano se viene dura.

El silencio oficial por parte de los funcionarios de primera linea por la dentencion de los hermanos Sergio y Pablo Schoklender quienes pidieron su rapido traslado a la carcel- acusados de formar parte de una asociación ilícita que estafó a la Fundación Madres de Plaza de Mayo- hace presagiar que los nubarrones se convertiran en huracan.

La noticia repercutió en todos los medios, impacta en una agrupación de Derechos Humanos crucial en la simbología K, pero también en la transparencia de la administración de los fondos del Ministerio de Planificación Federal, de Julio De Vido ya que los funcionarios que debían controlar las obras que no se hicieron son el subsecretario de Obras Públicas, Abel Fatala; y el subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda, Luis Bontempo.

La hipótesis de los investigadores del caso es que los Schoklender estafaron a las Madres de Plaza de Mayo quedándose con alrededor de 70 millones de pesos de los 750 millones que la Casa Rosada giró la fundación de Bonafini para construir viviendas sociales.

(Fuente: Diario Veloz)