La construcción de uno de los puentes complementarios del Tren Suburbano aún no se ha concluido aun cuando el Sistema 1 de ese medio de transporte cumplió su primer año de funcionamiento en junio pasado. El puente vehicular que se supone correrá de la avenida Radial Toltecas, en la zona centro de Tlalnepantla, hacia la avenida Mario Colín en dirección al Distrito Federal, presenta un avance de poco más de 50 por ciento, aunque sus trabajos iniciaron en enero de 2008. De acuerdo con trabajadores del lugar, la construcción de la primera etapa de lo que será el Distribuidor Vial Toltecas no ha tenido retrasos, aunque desde hace más de cuatro meses no se observan avances en la obra. "Seguimos trabajando en el lugar, no se han suspendido las obras ni los trabajos y lo que nos dicen es que vamos conforme a lo planeado, pero no sabemos para cuándo terminaremos aquí", dijo uno de los empleados. Este puente es parte de las obras complementarias del Tren Suburbano y su realización la está supervisando la Junta de Caminos del Estado de México; de acuerdo con la dependencia la obra tiene un 66 por ciento de avance y será concluida en agosto próximo. Sin embargo en la zona sólo se aprecia una rampa de unos 20 metros de largo que se alza en la avenida Toltecas y se interrumpe en la esquina con la avenida Mario Colín, así como una segunda rampa, en Mario Colín hacia el Distrito Federal, de otros 40 metros de largo. Este martes en el lugar se encuentran 20 trabajadores que caminaban por las rampas y debajo de éstas, unos realizando mediciones y otros colocando varillas en las estructuras, pero sin tener conocimiento de cuándo se realizará el resto del puente. "Está pendiente que traigan lo que será la parte de arriba del puente para unirlos, pero no sabemos cuándo será esto y menos sabemos cuándo vayamos a terminar", señaló el empleado. Mientras que las obras de este puente siguen en proceso a 18 meses de haberse iniciado, los automovilistas que circulan por Mario Colín hacia el Distrito Federal deben esperar unos 30 minutos en un trayecto donde comúnmente se destinan no más de cinco minutos. Esto debido a la reducción de cinco a dos carriles que hay en el cruce de Toltecas y Mario Colín, que obliga a los conductores a desviar su curso y provoca una afectación en la vialidad de al menos dos kilómetros.