La organización separatista Patria Vasco y Libertad (ETA) reivindicó la autoría de cinco acciones armadas realizadas entre enero y mayo pasados, así como de un atentado frustrado, informó hoy el diario local Gara. En un comunicado enviado al rotativo español, ETA se responsabilizó de la colocación de un artefacto explosivo en la localidad vasca de Hernani y la colocación de dos bombas más, sin éxito, dirigidas contra los artificieros de la policía. El grupo armado asumió también la colocación del coche-bomba en el centro financiero del Campo de las Naciones de Madrid, que iba dirigido contra la empresa Ferrovial, cuya explosión causó sólo daños materiales. El comunicado destacó que este ataque fue "debido a la responsabilidad contraída por sus trabajos en el Tren de Alta Velocidad, que Madrid está llevando a cabo para incidir en la partición y destrucción de Euskal Herria por medio del cemento". El ataque contra la sede del Partido Socialista de Euskadi (PSE), en el municipio guipuzcoano de Lazkao, que provocó también daños en varias viviendas cercanas, ETA lo enmarcó en su campaña contra "los partidos fascistas españoles". En cuanto al artefacto que colocaron en la vivienda del dueño de la empresa Astilleros Murueta, la organización separatista aseguró que el ataque se debió a que el empresario se negó a pagar la cantidad de dinero exigida. Por último, ETA reivindicó la colocación de un artefacto junto al repetidor del Alto de la Granja, en el municipio cántabro de Guriezo, el pasado 6 de mayo.