Un suave volumen basta. Quizás, quien haya pasado el momento descrito en las letras de Como yo te amé, describen el mejor ánimo para afrontar el viejo amor que de forma inevitable se aleja. Deja asentado que finalmente uno se descubre a sí mismo y evalúa que tanto puede abrir su corazón, y puede encontrarse que ha hecho de su vida un inagotable sacrficio por la persona a quien se entregó.

Carlos Arboleda González un dedicado estudioso de las letras del cantautor mejicano, en una publicación en web titulada Armando Manzanero o la historia sentimental de nuestra vida (ver: http://letras-uruguay.espaciolatino.com/aaa/arboleda_carlos/armando_manzanero_o__la_historia.htm) describe así su perspectiva acerca de la composición de Armando Manzanero "Sólo cada uno de nosotros es dueño de su único amor. Sólo nosotros sabemos amar, lo que quiere decir que el amor es único, aunque nos pertenezca a todos. ¿Quién no ha sentido que su amor es único? Porque cada amor es el último, el único, el supremo:"

Añade que "Todos los cantantes, los poetas y los enamorados lo hemos escrito, cantado, soñado y perdido".

Pienso que no le falta razón. Así que como él afirmo: "Todos, con Manzanero, seguimos diciendo.."

Deja asentado que finalmente uno se descubre a sí mismo y evalúa que tanto puede abrir su corazón

Cómo yo te amé

Jamás te lo podrás imaginar

Pues fue una hermosa forma de sentir

De vivir, de morir

Y a tu sombra seguir

Así yo te amé

Cómo yo te amé

Ni en sueños lo podrás imaginar

Pues todo el tiempo te pertenecí

Ilusión no sentí

Que no fuera por ti

Así es cómo te amé

Cómo yo te amé

Por poco o mucho tiempo que me quede por vivir

Es verbo que jamás podré volver a repetir

Comprendo que fue una exageración

Lo que yo te amé

Cómo yo te amé

No creo que algún día

Me lo quieras entender

Tendrías que enamorarte como lo hice yo de ti

Para así saber

Cuánto yo te amé.

Que así quede escrito.