¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Ascellif escriba una noticia?
Esto sucede con mayor frecuencia de lo que queremos admitir, pero el verdadero problema es cuando procrastinar se hace cotidiano y un mal actual
¿Cuántas veces no te ha ocurrido que pasan días y días y lo que tenías planeado hacer, lo dejaste a un lado?
Esto sucede con mayor frecuencia de lo que queremos admitir, pero el verdadero problema es cuando procrastinar se hace cotidiano y un mal actual. Y es que, al analizar nuestro día, nos damos cuenta que no hemos hecho nada de nada, ni siquiera nos hemos quitado el pijama o tan solo estamos usando ropa deportiva o de casa.
Aquí es donde el verdadero problema comienza a surgir y resulta complicado querer admitirlo. Muchas veces lo negamos y nos decimos que nada nos pasa, pero al final no se está engañando a nadie. Estamos deprimidos.
¿Deprimidos? Si, aunque no te lo parezca quiero que respondas esto, ¿desde cuándo haces algo, sea laboral, recreativo o propósito de vida, que te encanta o que sueñas?
La depresión se suele tomar muy a la ligera, los doctores lo buscan normalizar su trato o el hablar de ello para ayudar a la mayor cantidad de personas posible, pero son los individuos los que siguen poniendo frenos ante la idea de que la salud mental es algo a lo que se le debe prestar máxima atención.
Es normal que luego de una pandemia mundial, nos cueste volver al ruedo en temas laborales y personales, y capaz pensamos que eran otros a quienes les podía llegar a afectar el tema de estar encerrados y con poco o nada de contacto con otras personas. Pero la realidad es que, cada vez son más quienes sufren de ansiedad y síntomas de depresión y lo menos que se imaginan es que el tema trillado de la crisis mundial puede que los esté afectando.
Según estudios de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) el tema no solo de enfermarse con Covid-19, sino el también la posibilidad de perder un ser querido, así como los problemas económicos que se sufrieron, el desempleo y la inseguridad, afectaron en mayor medida a quienes viven en el continente Americano.
Tú debes ser la prioridad en todo momento y en todo sentido, así que es momento de tomar acción y entender que a veces el dinero, las circunstancias y todo el mundo
Es por ello, que hoy en día es necesario prestarle mayor atención a nuestras acciones y qué es lo que estamos haciendo.
¿Quieres entender un poco más?
Es sencillo, haz una lista de aquellas cosas que tenías como metas y ver cuáles llevaste a cabo y cuáles no.
Una vez que tengas esta respuesta pasa a pensar el por qué no las lograste alcanzar. Esto te va a ayudar a entender las razones y poniéndolas en claro, vas a entender la profundidad de hasta dónde te has detenido.
Ahora que ya sabes qué es lo que colocaste a un lado, pero que luego no retomaste, en vez de juzgarte lo ideal es volver a trabajar en tí.
Parte de la ansiedad y depresión se combate al trabajar en nuestra autoestima, y aunque ciertamente no es la única solución si es una de las que más te ayudará a entenderte a ti y a mejorar.
Recuerda, tú debes ser la prioridad en todo momento y en todo sentido, así que es momento de tomar acción y entender que a veces el dinero, las circunstancias y todo el mundo, puede intentar afectarnos, pero como tu reacciones es lo que realmente puede marcar la diferencia.
¿Cómo comenzar a tomar acción?
Es sencillo en papel saber que hacer para comenzar a tomar acción, y es que solo necesitas cambiar tus hábitos.
Lo que hacemos diariamente es lo que nos ayudará a poder mejorar nuestra rutina. Y no se trata de cómo todo el mundo cree, ser productivo, se trata de hacer lo que debes hacer sin problemas y sin aplazar nada.
Crea una lista de lo que quieres hacer para poder acercarte a esa meta que te trazaste, y cúmplela. Al principio va a resultar bastante complicado, pero con un poco de fuerza de voluntad y algo de motivación interna.
Cada vez son más quienes sufren de ansiedad y síntomas de depresión