Italia pidió hoy a Somalia el "máximo esfuerzo" para liberar a los marineros del remolcador Bucaneer, secuestrado hace dos meses en el Golfo de Aden y ofreció a ese país su ayuda para la formación de policías y de guardacostas. Durante un encuentro en la sede de la cancillería italiana del Grupo Internacional de Contacto por Somalia, su titular Franco Frattini dio al primer ministro somalí Omar Abdirashid Ali Sharmarke garantía de que Roma realiza su "máximo empeño" para enfrentar los peligros para la navegación en el Golfo de Aden. Frattini rechazó que el gobierno italiano haya emprendido negociaciones secretas con los piratas que hace dos meses secuestraron al remolcador Bucaneer, con 16 marineros a bordo, de los cuales 10 son de nacionalidad italiana. Pero el canciller rechazó el uso de la fuerza para liberar a la nave italiana secuestrada el pasado 11 de abril. "Nuestra nave está en el mar al lado de otras, esto hace difícil cualquier acción que requiera el uso de la fuerza", declaró. Insistió en que las negociaciones deben tener solamente carácter político y que Roma confía en las autoridades somalíes. Según Frattini, el problema de la piratería "depende de la crisis política y socioeconómica en tierra firme, no en el mar". Por ello, dijo, "Italia está lista para aumentar sus esfuerzos y apoya todas las iniciativas internacionales contra la piratería". Además, ofreció el apoyo italiano a la formación de las fuerzas de patrullaje en el Golfo de Aden y dijo que ello forma parte de "un vasto proyecto internacional dirigido a la estabilización política de Somalia". En la reunión del Grupo Internacional participaron representantes de 34 países y de organizaciones internacionales. El objetivo es preparar los instrumentos necesarios para dar seguridad a los países del Cuerno de Africa.