En medio del calor intenso del sol tropical cubano y el fuego liberado por los cuerpos de miles de jóvenes, hombres, mujeres y niños que se amontonaron para disfrutar el espectáculo, se desarrolló el concierto paz sin frontera.

Un despliegue de música inesperado, participaciones sorpresa y una que otra ocurrencia de los artistas latinos que se dieron cita en la plaza de la revolución pusieron a lagrimear a todos los que de una manera u otra, ya por tele, como por Internet disfrutamos de aquel evento.

Mucha emotividad en cada uno de los participantes, quienes, aunque con sobrada prudencia dejaron caer su chinita en relación al tema de la paz y la libertad; no así Juanes, quien llevado por la emoción tuvo el valor de pedir una cuba libre y no se refirió al trago de naranja con ron que allí se sirve. Juanes llegó al grado de gritar: ¡Muchachos, está en sus manos! ¡Vaya timbales! ¡en la propia plaza de la revolución!.

Tal despliegue, en un espectáculo nunca visto por la juventud cubana debe haber dejado en muchos de ellos sembrada la semilla de la curiosidad y el deseo de ser.

Los latinos nos conocemos y sabemos que los pensamientos nuestros no tienen fronteras como tampoco la música, lenguaje universal que habla sin hablar.

Tal despliegue, en un espectáculo nunca visto por la juventud cubana debe haber dejado en muchos de ellos sembrada la semilla de la curiosidad y el deseo de ser

Una canción del inmortal Víctor Manuel conmovió profundamente: ¡Qué difícil es buscar la paz!

Este concierto marca un hito en la historia cubana y podría la influencia musical, traer una nueva etapa de reflexión en las gentes de la revolución, que sin saberlo tienen a cuba suspendida, como en la edad media en medio de la modernidad que exhibe el mundo. Una revolución que parece no saber que la unión soviética abrió sus puertas a la unidad y al cambio, pues entendió que solo no se puede avanzar.

El concierto PAZ SIN FRONTERA superó todas las expectativas, dejó a Juanes. Más Juanes y Olga Tañón, más cañón, digo...más Tañón: ¡Es el tiempo!

¡Viva por Miguel Bossé, Danny Riveras, Amaury Pérez y todos aquellos buenos artistas que pusieron y unieron sus voces al servicio de la paz, la paz sin frontera! ¡Gracias por permitirnos disfrutar de ustedes y saber que todavía a personas que se atreven!

Ni las malas lenguas, ni el intenso calor pudieron para la celebración de la paz con participación de aquella gran masa humana que formó en la plaza de la revolución el pueblo cubano. Ahora expectante al surgimiento de una nueva revolución que les guíe hacia el cambio.

Se que usted me entiende, Fidel.