¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Magnu escriba una noticia?
Varios hijos de padres deportados pasearon con banderas de EE.UU. y un cartel en el pecho con el lema “No me dejes solo”, en español e inglés
Miami (EFE). Niños estadounidenses de padres deportados exigieron hoy al presidente de EE.UU., Barack Obama, que inicie la discusión de una reforma migratoria integral y que suspenda las redadas.
Con banderas estadounidenses y un cartel en el pecho con el lema “No me dejes solo”, en español e inglés, más de cincuenta menores, en representación de unos 400 niños del condado de Miami-Dade, pidieron la pronta intervención de Obama en el tema migratorio.
“Presidente Obama mantenga su promesa, detenga las redadas y las deportaciones. No me deje solo, deseo a mi familia de regreso. Proteja mis derechos como ciudadano”, rezaba el mensaje que leyeron varios de los menores, cuyos padres, en su mayoría, son de México, El Salvador, Guatemala, Colombia, Venezuela y Honduras.
Durante la manifestación, una argentina, que declinó ser identificada, dijo que teme salir a pasear con sus tres hijos, dos argentinos y una niña estadounidense, por las redadas que constantemente lanza la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).
Nora Sándigo, directora ejecutiva de la Fraternidad Americana y organizadora de la manifestación, aseguró que varios de los niños “carecen de todo” y hasta sufren problemas emocionales.
“Hoy precisamente estaba fijada una reunión entre el presidente y congresistas demócratas y republicanos (para tratar la reforma), eso no sucedió. Lo que nos llena de preocupación porque cada vez tiene menos importancia el tema de inmigración”, informó la activista.
Sándigo, de origen nicaragüense, es guardián ad-litem de más de 600 niños estadounidenses, quienes presentaron una demanda contra Obama para que suspenda las deportaciones de sus padres extranjeros indocumentados hasta que se apruebe una reforma migratoria.
La activista hizo un llamamiento a Obama y al Congreso estadounidense para que tomen acción ya que se trata de un caso de “importancia nacional” y advirtió que si los congresistas no actúan, se corre el riesgo de que más de cinco millones de niños se “queden huérfanos”.
“Tenemos mucha esperanza en que el presidente Obama hará la diferencia porque se ha identificado mucho con las minorías, con los inmigrantes”, expresó.
La Fraternidad Americana, una organización pro derechos de los inmigrantes, lanzó en mayo pasado la campaña “No me dejes solo” para suministrar alimentos, refugio, medicinas y útiles escolares a los menores.
Los primeros donativos fueron entregados hoy, incluyendo los otorgados por los comisionados Javier D. Souto y José “Pepé” Díaz, que impulsaron una resolución en el condado de Miami-Dade en la que exhortaron a Obama a enmendar las leyes de Inmigración.