Insurgentes talibanes atacaron este miércoles con un coche bomba una zona de viviendas de Kabul donde se alojan contratistas extranjeros, pero solo murieron los asaltantes en el intento, aseguraron las autoridades afganas.

Un talibán murió al detonar el automóvil a la entrada de la zona de viviendas 'Green Village', mientras que los otros tres fueron abatidos por los policías al intentar penetrar en el complejo, indicó el viceministro del Interior, Ayud Salangi. "No hubo ninguna víctima entre nuestros amigos extranjeros ni entre los afganos, todos están bien", escribió Salangi en Twitter.

El ataque a este complejo fortificado donde viven y trabajan muchos extranjeros es el último de una serie de atentados suicidas en Kabul, antes de la retirada de las fuerzas occidentales que llevan 13 años en el país.

Todas las tropas de combate de la OTAN se retirarán de Afganistán a finales de año, aunque 12.500 soldados se quedarán en 2015 para apoyar al ejército afgano y a la policía. Un fotógrafo de AFP también oyó disparos en el lugar poco después de la explosión.

Los talibanes reivindicaron el ataque en una cuenta de Twitter autentificada. "Un coche bomba golpeó Green Village, una de las zonas de extranjeros más seguras".