La madre de Berta Cáceres, la ambientalista hondureña asesinada en marzo, solicitó este lunes a bancos internacionales cancelar el financiamiento a la empresa que construye el proyecto hidroeléctrico Aguas Zarcas y que presuntamente está involucrada en el crimen.

La carta está dirigida a bancos de Holanda, Finlandia, Alemania y Centroamérica que han financiado a Desarrollos Energéticos S.A. (DESA) para la ejecución del proyecto, en el río Gualcarque.

"Estoy solicitando a estos bancos que, como ellos están financiando este proyecto de muerte y sangre, deben responder suspendiendo el financiamiento a DESA", dijo a la AFP Austra Cáceres, madre de la asesinada ambientalista.

En un comunicado difundido por redes sociales, Austra Cáceres anunció además que, en caso de que no cumplan con su solicitud, demandará a los entes financieros ante las cortes en cada uno de sus países, porque "también son responsables" del asesinato.

El objetivo es que "otras personas no vivan el dolor de perder un ser querido de manera tan vil como asesinaron a nuestra Berta", apuntó.

Berta Cáceres ejercía de coordinadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh) cuando fue asesinada la madrugada del 3 de marzo por pistoleros que entraron a su casa en la comunidad de La Esperanza, oeste.

Seis personas está detenidas como sospechosas, incluyendo un empleado de DESA.

Austra Cáceres dijo a la AFP que "está claro en las investigaciones del Ministerio Público que DESA tuvo que ver en el asesinato de mi hija y ellos (los bancos) han estado financiando" a la empresa.

Cáceres tenía medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por denunciar que DESA la amenazaba de muerte por encabezar la movilización de los indígenas lencas contra la construcción de la represa dentro del territorio comarcal.