El técnico del FC Barcelona, Luis Enrique Martínez, reconoció este martes que tiene el corazón dividido y que será "difícil y especial" enfrentarse el miércoles en Liga al Sporting de Gijón, el club de su alma, cuyo entrenador es Abelardo Fernández, su amigo de infancia y antiguo compañero de equipo.

"Soy socio desde hace infinidad de años, desde niño iba con mi bandera hecha por mi madre a la grada", relató el técnico azulgrana en la rueda de prensa previa al partido aplazado de la 16ª jornada de Liga, en el estadio de El Molinón (17h30 GMT).

"Soy sportinguista desde la cuna y hasta la muerte. Pero, a veces, los que nos dedicamos al fútbol tenemos que pensar de otra manera. Mañana será un día difícil y especial, pero tengo que hacer mi trabajo", dijo.

"El escenario significa mucho para mí, está toda mi familia en Gijón, es mi casa sin ninguna duda, pero manda el trabajo y mi obligación como entrenador y profesional es ir a por los puntos, que para nosotros son básicos", añadió el asturiano.

El Barça, sólido líder liguero, puede seguir aumentando su renta en la punta de la tabla, ya que una victoria dejaría a seis puntos a su inmediato perseguidor, el Atlético de Madrid, y a siete al Real Madrid.

- Abelardo y Luis Enrique, amigos desde siempre -

Pero, al margen de la competición por los puntos, la carga emocional para el técnico azulgrana será fuerte.

Nacido en Gijón hace 45 años, Luis Enrique Martínez comenzó a jugar en la Liga en 1989 con el Sporting, en el mismo momento en que su amigo de infancia Abelardo Fernández, de la misma edad, también llegaba a la élite con el club asturiano. Ambos futbolistas jugaron después en el Barça (1996-2002) y la selección española.

"¿El 'Pitu' Abelardo? Desde los siete años hemos ido juntos al colegio, hemos tenido mucha suerte de poder compartir muchos momentos, de poder disfrutar de una profesión como es la del fútbol", dijo Luis Enrique.

"Es una persona muy importante en mi vida, muy cariñosa, él y su familia. Tenemos una relación perfecta y el tiempo no hace más que reforzar esta relación", insistió el técnico azulgrana.

Ser amigo de un compañero en el terreno de juego es una "situación ideal", añadió Luis Enrique acerca de sus delanteros Lionel Messi, Luis Suárez y Neymar, que afirman estar muy unidos y demuestran una gran complicidad sobre el terreno de juego.

Esa situación "es difícil que se dé, porque dentro de un grupo (...) no puedes ser amigo de todas las personas. La situación ideal es que haya una relación de amistad, si se produce en el campo todavía mucho mejor. Se puede ver cómo disfrutan cada gol, cómo lo celebran, cómo bromean. Es la situación ideal y perfecta que desearía cualquier entrenador y jugador", concluyó.