Elizabeth Taylor, de 78 años, un ícono del cine mundial, ingresó en el centro médico Cedars-Sinai de Los Angeles, donde se encuentra bajo observación aquejada por problemas cardíacos. La actriz británica sufre del corazón desde hace años y en esta ocasión, su ingreso respondió a una "condición física recurrente", según informó su representante Sally Morrison, mediante un comunicado. La ganadora del premio Oscar en dos ocasiones, por "Una mujer marcada" en 1960 y "¿Quién teme a Virginia Woolf?" en 1966, en la categoría de mejor actriz, fue operada con éxito en 2009 de una fuga en una válvula cardíaca. Taylor, que contrajo matrimonio en ocho ocasiones, dos con Richard Burton, ya había estado en el mismo hospital a principios de semana, pero ahora permanecerá en el centro para que su condición sea evaluada, añadió. "Su familia y amigos cercanos aprecian el cálido apoyo e interés de sus seguidores locales, pero han pedido que la gente respete su privacidad y le den tiempo y espacio al equipo médico para que se concentre en devolverle la salud", señaló el comunicado. Además de sufrir de diversas neumonías durante su vida, Taylor ha superado en los últimos años problemas de espalda, diversas operaciones de cadera e, incluso, un tumor benigno en el cerebro que le fue extirpado en 1997.