INCENTIVO O DESALIENTO

POR ALFREDO MARTINEZ

Esto que paso que ya paso y que no tiene que pasar, lo vi desde cerquita, me encontraba en ese entonces compartiendo con un grupo de gente una actividad Revolucionaria, motivos por el cual después de haber concluido, luego del almuerzo correspondiente, alguien hablo de organizar una cola para que todos firmaran y plasmaran su huella, para luego entregarles lo que escuche llamar un “INCINTIVO”, que yo particularmente le cambiaría el nombre por “DESALIENTO”, y ya les explico porque.

Luego de realizar en operación conjunta, previa organización de las Patrullas, visitas programadas de seguridad, en varios puntos estratégicos del Municipio Roscio, San Juan de los Morros, Estado Guárico, nos dirigimos a un punto de control de estas actividades, allí cada jefe se reportó como es la costumbre en estos casos, la operación fue sin duda todo un éxito, en el tiempo estimado se ejecutó en cada uno de los sitios y de la misma forma la colaboración por parte de las patrullas fue excelente en cuanto al trabajo que estaba en proceso para ese momento de la actuación de los grupos organizados ese día sábado 03 de Septiembre de 2016.

De la misma forma que se hizo la cola para el almuerzo, también se realizó la del mencionado Incentivo que me permito autocriticarme, por ser uno más de los que día a día, esta resteado con este proceso Revolucionario, cuando hablamos de incentivo, que de paso nadie estaba pendiente de eso, debe ser algo que cause aliento, animo, estímulo y lo que digo no es por mí en particular, pero muchas de las personas que salieron de la cola, no pudieron comprar un café que una también humilde niña vendía en las cercanías por un cómodo precio de 100 Bs, este llamado Incentivo no le alcanzaba para eso. Que se puede comprar con sesenta Bolívares (60 Bs), aunque para algunos es difícil creerlo, así fue, de tal manera que el que invento esto, compatriotas, creo que no se ubicó en el tiempo o se quedó estacionado en el pasado.

Compromiso por la patria, eso fue asi, como un aliciente

Me autocritico, para de esta manera, hacer entender, que el compromiso por la Patria No necesita ningún tipo de incentivo y mucho menos de esa característica, de freno y desanimo, que fue lo que causo en cada uno de los que estuvieron como yo en esa cola con control de firma y huellas, que puede prestarse para otra cosa, que ojala no sea así y prevalezca  alguna mala interpretación de algún subalterno.  

Lo cierto es que esto lo llamaría yo un “desaliento” que a cualquiera pudiera quitarle el ánimo de continuar perteneciendo al grupo voluntario de servicio a la Patria que ya me imagino que ustedes saben a qué me refiero, los que estuvieron allí de Parapara y de Ortiz saben también que eso fue así. Esto que paso con el mencionado incentivo debe de ser considerado, para hacerlo llegar al grupo Organizado de tal forma que verdaderamente lo sienta como un aliciente y no una humillación.