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El sueco está desquiciado por su sequía goleadora, como se vio en su autoexpulsión ante el Almería. Ibrahimovic se ha convertido en el jugador más amonestado del Barça. Guardiola ha tenido que sustituirle en varias ocasiones para evitar males mayores y no sabe como reeducar a su crack.
Los delanteros viven del gol. Esta es una de las máximas del fútbol y algo que está desquiciando a Ibrahimovic. El delantero está descentrado en las últimas jornadas y es algo que está pagando su equipo, cuya máxima consecuencia la sufrió el Barça en Almería, donde el sueco se autoexpulsó de modo absurdo y dejó a su equipo con diez. Ibra posee el dudoso honor de ser el más amonestado del equipo.
Dos goles en tres meses
El sueco no anda fino de cara a puerta en los últimos meses. De hecho, sólo ha conseguido dos goles en los últimos tres meses y eso le está afectando anímicamente. Ibrahimovic se ha visto superado por Messi quien le duplica en cuanto a número de goles este año. Incluso Pedro se ha consagrado como segundo máximo artillero de los azulgranas, lo que también ha minado el ego del sueco.
Las dichosas comparaciones con Eto'o
Desde su llegada Ibrahimovic ha visto como las comparaciones con Eto'o eran constantes. El camerunés, su antecesor en el puesto, sumaba el año pasado 23 goles a estas alturas de campeonato por los 15 que acumula el sueco.
El más amonestado del equipo
El sueco se ha convertido en el jugador más amonestado del Barça en lo que va de temporada. Ibra ha visto seis tarjetas amarillas y una roja y supera en este peculiar ranking a jugadores, en teoría más defensivos, como Puyol o Busquets que acumulan una sanción menos que el sueco.
Ibrahimovic ya acumula más amonestaciones que en su etapa en Italia, donde tenía una media de 5, 5 tarjetas por temporada. Durante sus seis temporadas en el Calcio, Ibrahimovic fue expulsado sólo una vez por roja directa y se produjo a raíz de una tángana entre jugadores de Inter y Roma. Además, fue expulsado por doble amonestación en otras 2 ocasiones, y todas ellas en la 2006-07, como jugador del Inter.
Guardiola ya ha tenido que sustituirle en alguna ocasión para evitar que fuera expulsado tras varias disputas con jugadores rivales y discusiones con los colegiados de los encuentros. Ahí están los casos de Espanyol o Villarreal, donde el sueco fue sustituido para evitar males mayores.