BRUNSWICK, Georgia, EE.UU. (AP) - El hermano de un joven de Georgia acusado de matar a su padre y a siete personas más en una casa rodante insistió el sábado en que el sospechoso no hubiera sido capaz de hacer daño a su familia, y especuló que una disputa por drogas pudo haber sido el origen de los asesinatos

Algunos miembros de la familia hablaron con la prensa frente al lugar donde se realizó el sepelio de siete de las víctimas halladas una semana antes, dentro de la casa que compartían, cerca de la costa de Georgia.

Su pesar se mezcló con la incredulidad, luego de que la policía acusó el viernes a Guy Heinze hijo, de 22 años, con ocho cargos de homicidio intencional, por las muertes de su padre, su tío, su tía y cuatro primos. La octava prima era novio de una de las primas, y su funeral estaba pendiente.

"Sé que mi hermano no hizo esto. Mi hermano tenía moral", dijo Tyler Heinze, de 16 años, afuera del cementerio rural, donde los siete ataúdes cubiertos de rosas fueron bajados a las tumbas.

"Puedo decir que en la casa había gente involucrada con drogas, y creo que alguien engañó a alguien y que alguien necesitaba que le devolvieran su dinero", agregó Tyler Heinze, quien alguna vez vivió en la casa rodante pero se mudó con su padrastro antes de los asesinatos.

La policía no ha señalado cómo murieron las víctimas ni qué evidencias tiene contra Guy Heinze, quien reportó el macabro hallazgo a las autoridades el 29 de agosto, en una llamada de emergencia a la policía. Al parecer aterrado, Heinze dijo a quien lo atendió: "¡Toda mi familia está muerta!", y añadió que al parecer todos habían sido asesinados a golpes.

Heinze fue encarcelado poco después de los asesinatos, acusado de poseer ilegalmente pastillas y marihuana, así como de mentir a la policía y de manipular evidencias.

Tyler Heinze se negó a dar detalles sobre el consumo de drogas en la casa rodante.

Los ataúdes de siete víctimas asesinadas en una casa rodante

"No voy a sentarme aquí a arruinar el nombre de mi familia", dijo. "No quiero que la gente piense que mi familia era una basura. Eran personas trabajadoras".

El sospechoso realizó trabajos de construcción y quería ser camionero como su padre, dijo su abuelo William Heinze.

"El amaba a su papá. Sé que en esa llamada de emergencia que oímos en las noticias él estaba destrozado, luego de encontrar a su padre muerto así", dijo el abuelo. "Simplemente no puedo creerlo, a menos de que se tengan algunas evidencias".

Decenas de personas se concentraron para el funeral en una iglesia en el condado de McIntosh, unos 30 kilómetros (20 millas) al norte del parque de casas rodantes donde ocurrieron los asesinatos, en el vecino condado de Glynn.

El ataúd del patriarca de la familia, Rusty Toler de 44 años, estaba debajo de una carpa verde, con los féretros de dos de sus hijos, Russell de 20 años y Michael de 29. Frente a ellos, estaban dos ataúdes con los restos de las hijas de Toler, Chrissy de 22 años y Michelle de 15.

Junto a los Toler estaba el ataúd de su hermana, Brenda Gail Falagan, de 49 años. Envuelta en una bandera estadounidense, tras haber servido en el ejército, estaba la caja de Guy Heinze.

Una víctima, identificada por la policía como Byron Jimerson, de 3 años e hijo de Chrissy Toler, sobrevivió con lesiones graves y permanecía hospitalizado en Savannah.