España e Israel acordaron indagar juntos y paralelamente a la investigación abierta por la ONU la muerte de un casco azul español en el sur de Líbano en unos combates entre el ejército israelí y Hezbolá, anunció este viernes el Gobierno.

"El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha telefoneado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, para expresar sus condolencias y tristeza por el fallecimiento en el Líbano del cabo Francisco Javier Soria Toledo, que lamentó", informó el Ejecutivo en un comunicado.

Los dos mandatarios "acordaron realizar una investigación conjunta israelo-española para esclarecer lo ocurrido, así como colaborar con la investigación que desarrolla Naciones Unidas", agregó.

El miércoles, el movimiento chiita libanés Hezbolá atacó al ejército israelí en una zona ocupada en la frontera con Líbano, las Granjas de Shebaa, provocando bombardeos de represalia de Israel en el sur del territorio libanés.

El embajador de España ante la ONU, Román Oyarzun, afirmó el miércoles que el cabo Soria Toledo, casado y de 36 años, había sido alcanzado por un disparo israelí.

El militar integraba desde noviembre un contingente español, con base en Marjayún, integrado de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL), encargada de vigilar la frontera israelo-libanesa y formada por 10.274 militares procedentes de 36 países.

Era la segunda ocasión en que participaba en la misión 'Libre Hidalgo' del ejército español en ese país, según el ministerio de Defensa.

La muerte de Soria eleva a 13 el número de soldados españoles muertos en misión en el Líbano, seis de los cuales, tres de ellos de origen colombiano, fallecidos en junio de 2007 al estallar un coche bomba cerca de su patrulla en Jiam.