Arcadia Fugaz

Ya hay reconstrucciones genéticas en una clonación cruzada para fomentar una raza de obedientes y mansos homínidos que desempeñaran las labores de los antiguos esclavos y sirvientes. Es un proyecto progresista dada con pasmosa inteligencia, eficacia y laboriosidad, allí será una sociedad nueva sin tener complejas, ni soñar en rebeliones. No hay límites para la clonación, ya en Venezuela, el Ministerio de Educación hace ensayos sobre el sexo en niños y niñas y, que ellos elijan lo adecuado a sus gustos.

Los bancos de espermas se prestan para este juego del progresismo. Es difícil imaginar a algunos padres deseando tener clones de sus hijos con una doble faz hormonal, tal como sucedió con la oveja Dolly. No es un asunto al azar, la Nueva Izquierda busca crear una destabilización social para generar conmoción y, dar paso a una nueva sociedad conformada por jóvenes del movimiento feminista y GTBLQ+.

Toda creación propone implantar un modo distinto de vida, es el despliegue de toda una trans- racionalidad para romper con el hilo implatado desde los orígenes del tiempo. Hay un rigor científico enmarcado por soportes antròporfòrmicos, antropocéntricos y geocéntricos con su correspondiente eros que le da energía exclusivamente terrenal.

Se deja aflorar una asfixia, donde pierden su sentido la vida de millares de hombres y mujeres, la orientación de adolescentes y el perjuicio de niñas y niños.

Es una experiencia que, se viene haciendo   bajo el consuelo de la religiosidad, donde se ventila la muerte delas ideologías. En un instante todo ha cambiado. Se rompe de esta manera, la perspectiva del bien común y de género. A esto, se le suma las desigualdades económicas y la modalidad cibernética que permite la condición de ser genérico.

Esta muy claro, es una teleonomìa impuesta por el hombre en vista de un fin valioso. Asimismo, la transformación del mercado que supone la utilización de las energías que lo dinamizan para lograr el rompimiento de la economía tradicional. Estoy hablando del estado planetario del ser humano. Los progresistas, vienen cumpliendo su papel del Nuevo Mundo.

¿Qué es el amor?  Sobre esto, hay una alteridad en general, son muros y fronteras que testimonian la finitud del ser humano y su agonía existencial entre ellos. Es el culto a los más atroces ídolos de nuestro tiempo¨: el terrorismo, el afán del poder por el poder, el irrespeto y desconocimiento de toda dignidad. Se debe tenerla, para sostener la propia vida y derrotar la miseria e indigencia que signan la actual existencia del hombre.

Algunos políticos están destruyendo el orden natural de las cosas. Y necesitamos una nueva geometría del poder que respete el orden procreativo y no nos encadene al imperio de la muerte, que es sinónimo del abismo que ha de venir.

De lo contrario, es fácil pronosticar la extemporaneidad teórica de algunos enfoques y conclusiones de La Nueva Era, todo es comprensible bajo una óptica, ahora, las teorías políticas nos llevan a un conjunto de intereses de particulares y, que está basada en garantías jurídicas, pero, hay una acción impoluta. Desviar al hombre de su camino natural y, a la misma mujer.

Se deja aflorar una asfixia, donde pierden su sentido la vida de millares de hombres y mujeres, la orientación de adolescentes y el perjuicio de niñas y niños

El Yo humano, se subleva y esboza sus propias teorías para ser el gestor de sí mismo. No hay que ignorar este camino elástico que tiene una genealogía óptica- lumínica que queda enlazada a un mundo inteligible.

Nos corresponde es atender la tradición y parecernos a nuestro tiempo. Y explorar con cautela el muladar comunicativo de nuestra esencia ante los efectos de mediatización de la educación, cultura, economía, política y, en general todas las modalidades del quehacer humano.

No debemos infectarnos del muladar que proyecta desde sus corruptas entrañas nuestra sociedad.  Somos hombres y mujeres y la Inteligencia Artificial con su manipulación de datos, nos puede engañar y quebrantar los sentidos.

El compromiso de la Inteligencia Artificial es describirnos un tránsito que nos invita a unas vivencias y construcción de un nuevo mundo. Tenemos una comunión de códigos, el robot ya posee en su chip, la historia, vivencias y expresiones de su creador. Lo que indica que tenemos una mediación entre libertades que poseen su intencionalidad. Lo demás es un público virtual. Es sin duda, una revolución científica dirigida a un público que rechaza el orden natural de lo maldito, surrealista y lo marginal.

Quienes erigen como una literatura terrorista la verdad y posverdad, entienden que no hay pretextos en la reingeniería de drones.  Así, estamos sufriendo un efecto de la tensión apocalíptica de lo que se viene. Fueron creados para la destrucción.

Son chips con la información necesaria para mecanizar lo no deseado, actúa con perfección. Buscan construir o desconstruir al mundo. Es el surrealismo.

Sartre trabajo contextualmente, la contextualización histórica y, aborda la concepción de libertad. Es una confrontación dada entre el escritor y su público para hacernos entender la encarnación de los argumentos con lo presente y porvenir. En concreto, busca conservar un orden social en la Francia de su tiempo.

Son códigos que determinan una situación.

* Escrito por Emiro Vera Suárez, Profesor en Ciencias Políticas. Orientador Escolar y Filósofo. Especialista en Semántica del Lenguaje jurídico. Escritor. Miembro activo de la Asociación de Escritores del Estado Carabobo. AESCA. Trabajo en los diarios Espectador, Tribuna Popular de Puerto Cabello, y La Calle como coordinador de cultura. ex columnista del Aragüeño