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Los independentistas catalanes celebran la fecha de11 de septiembre, para recordar que aquel día de 1714 perdieron su identidad. Pero en esa guerra se impuso un rey de la casa de los Borbones. Fue la Guerra de Sucesión
Los catalanes lucharon en esa guerra de 1714 porque preferían a otro pretendiente a la corona: el archiduque Carlos de Austria. Deseaban que España fuera gobernada por un rey de la casa de Austria, que en teoría, era menos centralista. Pero al final se impuso un rey de la casa de los Borbones. Fue la Guerra de Sucesión.
Tras la guerra, en 1714, desaparecieron muchas instituciones tradicionales catalanas como el Consejo del Ciento (una asamblea de Barcelona).
Por eso, los independentistas catalanes han usado esta fecha, la Diada, para recordar que aquel día perdieron su identidad.
Pero la verdad es que no fueron solo ellos. A partir de 1714, el rey borbón copió el modelo centralista francés. Eran los decretos de Nueva Planta que supusieron acabar con las viejas instituciones de Aragón, Castilla, Cataluña, Valencia, Mallorca y hasta las Indias. Solo permanecieron vivas las de Navarra y País Vasco. Y se respetó el derecho civil catalán.
El castellano pasó a ser la lengua oficial de las audiencias. Se unificaron fueros y tributos, se eliminaron las fronteras y aduanas internas, se creó un derecho común (el castellano), nació el ejército moderno y el funcionario de carrera. Era una modernización borbónica y la unificación del país a través de una administración gobernada desde un centro de poder omnímodo, algo parecido a la Unión Europea en Bruselas.
Pero desde la Transición, Cataluña ha recuperado sólo algunas de aquellas instituciones. Tiene un gobierno elegido por catalanes de la región, un parlamento catalán, pueden imponer algunos tributos( administrar leyes pero no legisla y hace algunas audiencias en catalán, así como educa en catalán con restricciones. El estado central cada vez tiene más poder de hecho en Cataluña. Incluso más o menos igual que en tiempos de los Austrias porque sólo la Sanidad, la Cultura, la Educación y la policía autónoma(compartida), están en manos del gobierno catalán. Se considera en España que Cataluña es la comunidad más póspera de España..
La jornada del 11 de septiembre se aprovecha para resaltar la interesante cultura catalana, herencia del reino medieval de Aragón, y para reivindicar la pérdida de sus privilegios históricos hace tres siglos. Sin embargo, esta fecha también se viene utilizando en los últimos años como altavoz para mantener posturas políticas concretas, entre ellas la independencia de Cataluña de España y su configuración dentro de Europa como nuevo estado. Por ello no hay que confundir la Diada con la historia de Cataluña.
En el siglo XV, la región que hoy comprende Cataluña estaba integrada en el reino de Aragón, donde también se incluía la actual comunidad autónoma del mismo nombre, el reino de Valencia (hoy Comunidad Valenciana) y el Reino de Mallorca (Islas Baleares). Cataluña era un principado dentro de un reino mayor y bajo el madato de un mismo monarca. Hasta ese momento, cada una de las regiones que formaban el Reino de Aragón habían mantenido sus propias instituciones políticas y jurídicas, un aspecto muy relevante que se continuaría en la futura España de los Reyes Católicos y hasta el año 1714. El propio reino de Aragón fue en su origen un condado hasta 1035, lo que da idea de cómo se fueron configurando estas regiones a medida que avanzaba la Edad Media. Es decir, que su historia está caracterizada por la conservación de la identidad de cada uno de los pueblos que la formaban, pero reunidos bajo un mismo monarca que les llevaba a participar en empresas comunes, sobre todo desde el punto de vista exterior.
En lo que atañe sólo a Cataluña, el principado autónomo surge como consecuencia de la desintegración del Imperio Carolingio en el siglo X, que dio origen a lo que se conoce como Cataluña Vieja y que extendía su influencia dese los Pirineos hasta el curso bajo del río Llobregat. El conde de Barcelona era el príncipe y a partir del siglo XII también asumió el título de rey de Aragón, al producirse la unión dinástica con Aragón. Es así como los designios de Cataluña se unen a los de otro reino para configurar una entidad política mayor, aunque se respetasen las tradiciones e instituciones de cada lado. La importancia de la población catalana ha sido máxima, por ejemplo, porque parte del Reino de Valencia surgiría debido a la repoblación llevada a cabo por catalanes y aragoneses en las tierras reconquistadas a los musulmanes.
En esta situación se llega al año 1469, cuando se produce el matrimonio entre Isabel I, reina de Castilla (no sin luchas internas dentro de su propio reino) y Fernando II, rey de Aragón, los conocidos como Reyes Católicos. En contra de lo que muchos creen, la unión dinástica no trajo consigo la unión institucional y de reinos. Tanto Castilla como Aragón siguieron existiendo como entidades políticas independientes, con sus organismos de gobierno, legislativos y sociales. En las capitulaciones matrimoniales antes del enlace entre Fernando e Isabel se dejó claro este respeto institucional y el hecho de que ninguno de los dos reyes tendría fácil el gobierno en el reino vecino en caso de fallecimiento del otro. La verdadera unión dinástica y política se empieza a producir con el ascenso del rey Carlos I, nieto de los Reyes Católicos, al trono de España y la asunción de los títulos reales de Isabel y Fernando en su misma persona.
La historia de la Diada es algo que la mayor parte de los que viven en cataluña considera una jornada folklórica.¿Se enseña la importancia de la Diada en el devenir del país?. Poco de forma directa, pero mucho desde el plano político. La muerte del rey Carlos II de España en 1700 sin descendencia sin heredero que pudiera acceder al trono provocó la Guerra de Sucesión, en la que se enfrentó Felipe de Anjou, de la dinastía Borbón francesa, contra el Archiduque Carlos, descendiente de la casa austriaca Habsburgo, reinante hasta ese momento en España. Ambos beligerantes reclamaban derechos sucesorios, puesto que sus padres y madres estaban emparentados con la corona española. Tras 13 años de guerra, Felipe de Anjou ganaría la contienda y el 11 de septiembre de 1714 sus tropas entraron en la sitiada Barcelona, uno de los últimos bastiones que oponían resistencia. En este punto hay que decir que los territorios del antiguo reino de Castilla se habían posicionado a favor de Felipe de Anjou en la guerra, mientras que los territorios de la antigua corona de Aragón (en la que se incluía Barcelona) estaban a favor del Archiduque Carlos.
La conservación de la identidad de los pueblos, de todos, es uno de los logros más difíciles de la historia
El ascenso de Felipe de Anjou al trono como Felipe V trajo la asimilación de todos los territorios de España bajo unas mismas leyes y estructura de Estado definidas en los Decretos de nueva planta. Algunos han querido ver en esta decisión un castigo a las regiones que se opusieron al nuevo rey y, aunque eso es posible, lo cierto es que la tradición francesa era la del centralismo político. De esta manera, las instituciones de Cataluña y sus privilegios fueron abolidos y se produjo una centralización de la vida política en la Corte. No obstante, las formas políticas catalanas no habían llegado hasta el siglo XVIII intactas. Muchas de ellas estaban en desuso, se habían actualizado o se habían abolido por diversos motivos.
Cuando Cataluña se formó como comunidad autónoma en el nacimiento del Estado democrático español de 1978, el Gobierno catalán decidió que el 11 de septiembre sería la Diada, como forma de reivindicar la pérdida de autonomía política que se produjo con la llegada de Felipe V y la derrota en la Guerra de Sucesión. Hasta el año 1714, Cataluña había sido respetada en su ámbito político por los dierentes reyes españoles (que también lo eran de Aragón y, por lo tanto, de Cataluña). No existía una oposición dentro de la propia Cataluña a su presencia en la entidad española (es difícil hablar de que entonces hubiese un Estado español tal y como hoy lo entendemos). El uso de la historia para oponer la realidad Cataluña-España vino mucho después, en el siglo XIX, con el surgimiento del catalanismo. Sin embargo, la realidad histórica es que Cataluña existió como entidad política independiente en la Edad Media y el Renacimiento, pero integrada en un reino que a su vez se incluyó en otro mayor tras el enlace de los Reyes Católicos.
Ada Colau la alcaldesa de Barcelona confirmó lo que nadie dudaba: el próximo domingo, 11 de septiembre, estará en la manifestación de la Diada organizada por las entidades ANC y Òmnium Cultural. Con simpatias hacia el soberanismo, la alcaldesa de Barcelona puso fin a la duda que abrió hace dos semanas cuando dijo "Hay más motivos para ir que para no ir" a los actos, que ya dejaba pocas dudas.
Colau confirmó su asistencia en una entrevista publicada en el periódico catalán «Ara», en la que argumentó, como ya había insinuado anteriormente, que hay que acudir para plantar cara a la "deriva autoritaria del PP, que parece que no tiene freno, por la judicialización de la política y por la amenaza sobre las instituciones, y en concreto, el Parlamento catalán.
La alcaldesa puntualizó que el año pasado se ausentó de la cita porque había "un contexto electoral en que se estaba pidiendo el voto para determinados partidos". La alcaldesa pasa por alto esta vez que la Diada también llega en un momento de intensidad política tanto a nivel estatal, con una investidura pendiente, como en el ámbito catalán, con una cuestión de confianza y falta de presupuestos que entorpecen la actividad parlamentaria habitual.
"Plural pero comprometida"-es la actitud de la alcaldesa.Además, Colau aprovecha para hacer bandera, una vez más, de que su formación, BComú, es "inequívocamente soberanista". Alabando el carácter "plural y diverso" de su formación y sin querer mojarse aparentemente por el "proceso", Colau defiende que están "completamente comprometidos" con la celebración de un referéndum. Un referéndum que no debe ser plebiscitario porque "es una ingenuidad pensar que se puede hacer de manera unilateral y que será reconocido en Europa sin el apoyo del Estado", aseguró.
A menos de una semana para la celebración de la Diada, y con la confirmación de la asistencia del presidente Carles Puigdemont a la Diada, Colau se decide a ser una de sus protagonistas. Las instituciones nacionalistas agradecen su presencia y la ven como un atractivo que anime la asistencia pero queda por ver cómo se tomarán los independentistas de calle que la alcaldesa esté a primera línea con un discurso que ella no quiere que suene a separatista.
Podem también estará, según lo ha confirmado el secretario general del Podem, Albano-Dante Fachin.Este ha anunciado que algunos miembros de su dirección irán a la manifestación independentista del 11 de septiembre, para defender la "pluralidad" de la Diada.
En rueda de prensa, Fachin ha aclarado que no comparten la hoja de ruta de JxSí ni la demanda de incluir un referéndum unilateral de independencia, pero entienden que, al margen de esas demandas, "comparten muchas cosas" con las personas que se van a manifestar masivamente.