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Pocos anotan que el delantero peruano jugó un torneo sudamericano marcando dos goles que serían decisivos en su carrera futbolística
¿Quién puede negar que Claudio Pizarro Bossio a sus 30 años es un crack? Ha demostrado ser el mejor delantero peruano de las dos últimas décadas, confirmando su calidad al obtener con el Werder Bremen la Copa Alemana 2009. Ha jugado en Europa en varias oportunidades los torneos de clubes más importantes (Uefa, Champions League), y en Japón se hizo con la Copa Intercontinental vistiendo la camiseta del Bayern Munich.
Sus goles lo hacen virtuoso, lo llevaron de la mano a esa porción de “Meca de Soccer” llamada Bundesliga. Pero, dejando de lado por un instante su aventura en el viejo continente, hoy he venido a rescatar un instante de su carrera pasada por alto. Lo que nunca se ha escrito en negritas. Pregunto ¿Cuántos torneos de clubes sudamericanos ha jugado Claudio Pizarro?
Se demoró en recordarlo o no lo recuerda. O simplemente no lo sabe.
Pues sí jugó uno e hizo dos goles. Por supuesto, no llegó a llevarse la Copa, pero dejó el sello de su calidad que lo harían un año después migrar a Europa.
El joven delantero jugaría su único torneo sudamericano pero dejaría una gran impresión haciendo dupla con Roberto Silva Pro
Fue en la primera edición de la Copa Merconorte (1998). Alianza Lima jugaba la última fecha de la fase de grupos en la capital peruana frente al The Strongest boliviano (aunque ya sin chance de alcanzar el primer lugar que lo detentaba el Atlético Nacional de Colombia). El técnico Edgar Ospina alineó a dos delanteros jóvenes que no habían tenido continuidad en el equipo blanquiazul en la temporada local 98. Uno de ellos era Claudio Pizarro de 20 años. El joven delantero jugaría su único torneo sudamericano pero dejaría una gran impresión haciendo dupla con Roberto Silva Pro.
Apenas a los 9 minutos Pizarro anotaría el primero, y al minuto 54 alargaría el marcador.
Contundente en ambas jugadas.
Roberto Silva completaría con dos goles más, la goleada de 4-0.
El Torneo Merconorte y este partido en especial, sirvió a Claudio Pizarro para consolidarse en el cuadro titular de Alianza Lima. Junto con Roberto Silva formaron una delantera efímera pero sólida (dupla SI-PI) que duraría sólo hasta el fin de año. Alianza Lima perdería la final del Clausura ante el Sporting y no jugaría la Copa Toyota Libertadores de 1999; y Claudio Pizarro no jugaría más un torneo sudamericano.
La anécdota: En el último clásico de 1998 ocurriría un singular suceso; Alianza Lima alinearía a dos delanteros blancos (Silva y Pizarro) y Universitario a dos delanteros de color (Farfán y Esidio). Sin precedentes, en más de medio siglo de clásicos
Sus goles lo hacen virtuoso, lo llevaron de la mano a esa porción de “Meca de Soccer” llamada Bundesliga