SENSIBLE: Entiende el sentir de la gente, púes sabe de ante mano que está para resolver problemáticas.

SOCIAL; Se le mira en muchos lugares, visitando Colonias, Barrios, Comunidades, todos los rincones de la ciudad, está cerca del pueblo.

SENCILLO; Sin tanto protocolo, recibe a la ciudadanía, fácil de acceder, tiene una vida tranquila, austera.

COMPROMETIDO; Conoce sus funciones y sabe qué viene a servir, no a servirse. Menos palabras y más acción.

VISIONARIO; Aspira a tener una mejor ciudad, contribuye a hacer mejoras, innova, tienen capacidad de negociación y creatividad.

HONESTO; Tiene claro qué la nómina es sagrada, qué la política es pasajera y qué debe rendir cuentas de su actuar.

ORGANIZADO; Lleva un orden en su tarea política, debe ser puntual, conoce de los temas y está preparado para ello.

TOLERANTE; Con aquellos conciudadanos qué no compartan sus ideales debe sólo escuchar y callar, no pelear, no caer en provocación, debe ser ecuánime y diplomático. Respetuoso a las críticas.

TRABAJADOR; Activo siempre en las tareas qué desempeñe, hasta terminar la jornada completa. Poner el ejemplo, el juez por su casa empieza. Desquitar el sueldo haciendo cosas loables y admirables para la Ciudadanía. Arremangarse la camisa y ensuciarse los zapatos. Dejar la oficina e ir al trabajo de campo.

El PATRÓN ES EL PUEBLO; Debe reconocer qué desde la más alta responsabilidad política hasta la más ínfima se necesita al Pueblo y deben respetarse sus leyes y su forma de ser. Tener claro qué el único objetivo de la política es para representar a la Ciudadanía y qué se debe a ella. Qué tener el poder es sinónimo de HUMILDAD.