El ciclista español Alberto Contador abandonó este lunes el Tour de Francia tras sufrir una caída en la décima etapa, que se disputó entre Mulhouse y la Planche des Belles Filles, en la que se fracturó la tibia.

Tras la etapa el responsable de su equipo, el danés Bjarne Riis, informó de que, tras realizar unas radiografias al ciclista en la unidad médica móvil del Tour, habían descubierto que se había fracturado la tibia.

"No es una fractura grave pero necesita ser operada", comentó Riis. "Rápidamente me dijo que iba a ser difícil seguir. Lo ha intentado, pero se encontraba muy mal. No había nada que hacer", añadió el danés.

El madrileño, ganador del Tour en 2007 y 2009, quedó resentido en su rodilla derecha tras el golpe y, después de continuar unos kilómetros, finalmente decidió bajarse de la bicicleta. El percance se produce cinco días después del abandono del defensor del título, el británico Chris Froome, por lo que la carrera ha perdido a sus dos máximos favoritos sobre el papel.

Contador se cayó en el kilómetro 64 de esta etapa de montaña de 161, 5 km de largo, la más dura del tríptico de los Vosgos, donde el de Pinto había anunciado que pensaba pasar al ataque para recuperar tiempo. Pero el español se encontró en el suelo en el descenso del Petit Ballon, justo antes del inicio del ascenso al Platzerwasel.

Con la rodilla derecha sangrando, Contador fue asistido enseguida por los médicos y asistentes de su equipo, y debió cambiar de bicicleta para continuar su ruta en la primera etapa de gran montaña de esta edición.

El ciclista de Pinto también tuvo que cambiar calzado tras la caída que le arruinó una de sus zapatillas de ciclista, perdiendo casi cuatro minutos con respecto al pelotón en el marco de este incidente.

Sus compañeros del equipo Tinkoff lo esperaron (Bennati, Morkov, Roche) para encarar el ascenso del Platzerwasel en grupo, pero finalmente el español capituló, minutos después de haber cruzado la cumbre y haber conversado con Riis. Evidentemente, el dolor no lo dejaba trabajar como esperaba.

Entonces, Contador detuvo su bicicleta, se subió al auto del equipo y se despidió del Tour-2014, al que había llegado con excelentes piernas después de una buena exhibición en el Dauphiné, ensayo general de la ronda gala.

En el pasado, el madrileño raramente se cayó en una etapa del Tour. Pero una caída sufrida en la primera etapa de la edición 2011 de la ronda gala terminó por ponerlo en desventaja y acabó finalmente en el cuarto puesto en París, después de haber calentado la carrera en las etapas alpinas recién durante la tercera semana de competición, a la espera de ganar fuerzas sobre la definición.

Este año el español prácticamente no había cometido errores en su preparación para el Tour, su principal objetivo de la temporada. Ganó dos carreras del calendario mundial, la Tirreno-Adriático y la Vuelta al País Vasco, y quedó en el segundo puesto de otras dos competiciones de prestigio como la Vuelta a Cataluña y la mencionada Critérium del Dauphiné.

Cuando se cayó, Contador, de 31 años, ocupaba el noveno puesto de la clasificación general en la largada de Mulhouse, a 4:08 del líder, Tony Gallopin.