Una empresa de chocolate premium ha llevado las historias de vida de productos a un siguiente nivel mediante la incorporación de un compromiso de transparencia con la conservación de la selva tropical. Lanzado en 2008 y ahora en plena expansión en todo el mundo, con sede en San Francisco Original Beans ofrece un enlace directo entre sus clientes y el trabajo de conservación que apoya.

Por cada barra vendida, Original Beans planta un árbol en la selva de donde provienen los ingredientes de la barra. Cada barra lleva un certificado dentro de la envoltura con un número de lote que designa la ubicación de un nuevo árbol. Al ingresar el código de seguimiento en la página web de la compañía, los clientes no sólo pueden rastrear donde se cultiva el cacao en su barra individual, sino también ver su contribución a los esfuerzos de la reposición de la selva chocolatera. Por lo tanto la empresa dice: ‘ Una barra, un árbol, veamos.’

Original Beans ofrece tres variedades de chocolate de un solo origen, de Ecuador, Bolivia y la República Democrática del Congo. La empresa se alía con la cooperación de los agricultores-OPS en estas áreas, que planten árboles de cacao además de una rara mezcla de árboles necesarios para la diversidad biológica. La incorporación de los costos ecológicos y sociales en su modelo de precios significa que cada 3, 5 oz (100 g) de barras de chocolate tiene un precio de USD 12. Incluso para una indulgencia que ayuda al medio ambiente, queda por ver si los clientes estarán dispuestos a pagar regularmente los dos dígitos para las barras de chocolate.

Pero no hay duda de que es bueno para facultar a los consumidores a ver a un efecto directo y positivo medible sobre el medio ambiente con su compra, especialmente cuando las marcas de encontrar formas de participar para compartir los beneficios.

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