José Luis Sánchez Solá, carismático y polémico director técnico, se asumió como único responsable de la caótica actuación que ha tenido Estudiantes Tecos en el Torneo Clausura 2011, con dos triunfos a cambio de seis descalabros. Tras la cuarta derrota al hilo para Estudiantes, hoy por goleada 1-5 ante el líder general y único invicto del certamen, Pumas de la UNAM, en el estadio Olímpico Universitario, el timonel juzgó que la respuesta al mal desempeño del cuadro tapatío sea no saber transmitir a sus pupilos lo que pretende que el equipo desarrolle en el terreno de juego y que solo juega bien a ratos. "De antemano sepan, y sin tirarme al suelo ni nada porque me valgo de 20 mil cosas, pero con la cabeza siempre arriba, que el único responsable soy yo. Yo confié en este grupo, yo soy el que les hablo, el que no supo imponer a los refuerzos (a la directiva) y las ideas que traía en un principio". En rueda de prensa, donde no se midió en palabras y actos para explicar lo que siente por la baja producción del conjunto zapopano, advirtió que ha hecho todo lo posible por hacer que el equipo funcione en la cancha y no lo ha logrado. "El equipo ha jugado de tres o cuatro maneras y no las hemos podido solventar con la contundencia, con la definición, la sapiencia. Parecería que a ratos (funciona el equipo), que a ratos nos vemos bien, pero en los largos ratos no nos vemos bien y en eso no he sabido poner esa palabra clara o ese movimiento o esa acción clara en muchas semanas". Aunque en su trayectoria, primero con Puebla y ya una vez con Tecos, utilizó como argucia para motivar al grupo a mejorar su rendimiento su posible renuncia al cargo, dejó en claro que quiere trabajar por largo rato en este club. "Yo he renunciado otras veces, como la última vez que estuve acá (cuando cayó 1-4 cuando dirigía al Puebla), así con ese convencimiento tengo todo. Yo no brinco como rata del barco, pero necesito a ver quien carajos me ayuda porque está ‘cañón’, hacemos agua por todos lados", expuso tras el revés 1-5 de hoy y que acumulan 21 tantos recibidos en sus ocho encuentros. Luego que el capitán del equipo, Juan Carlos Leaño, atribuyó que el factor de la mala fortuna tiene influencia en el mal torneo con la frase "al perro más flaco se le cargan todas las pulgas", estimó que son los propios jugadores quienes decidirán si él prosigue en el puesto de entrenador. "Al final de cuentas los que tienen la solución son ellos (jugadores), entonces habrá que hacerles mucho caso en dichos y en hechos. Yo entiendo que a los perros más flacos se le suben las pulgas porque se arrinconan en los basureros, si se fuera a un jardín no se le subirían las pulgas al perro flaco ese". "Ahorita pasas este trago amargo y mañana levantas la cabeza diciendo 'no, el que viene nos resulta' y planeamos esto y lo otro, pero a final de cuentas la respuesta positiva o negativa la tienen los futbolistas, ellos son quienes tienen que tener una respuesta, ellos son quienes tienen que crear el último vínculo, el último compromiso, que es el que vale, el que se pone en acción". Y tras rechazar que exista desaprobación del grupo hacia su trabajo o su persona, por lo menos de forma palpable, aseguró que aun con la escasa producción del equipo, seis puntos de 24 disputados y que son sotaneros del grupo Uno, aún pensaría en una virtual calificación a la liguilla, pero la realidad le indica que ya debería pensar a futuro. "Pues así que vea que alguien me pone cara o puchero no, pero mí idea no ha sido clara, mi accionar no ha sido claro. 27 puntos (que restan por disputar) son muchos todavía, con 27 puntos clasificas, pero el problema es que hay un deterioro, como que hay una subida toda la semana y luego vienen estas dos horas trágicas de los fines de semana y todos caídos, y cosas positivas para sacar como conclusión".