La Fiscalía de Hannover cateó hoy la residencia del todavía presidente de Alemania, Christian Wulff, sobre quien está abierta una línea de investigación judicial por sospechas de corrupción y tráfico de influencias. La Fiscalía precisó que no extendió orden de cateo porque la revisión del inmueble se llevó a cabo con el acuerdo de Wulff, quien dimitió al cargo el pasado 17 de febrero en medio de escándalos en torno suyo y una profunda pérdida de prestigio y credibilidad entre la opinión pública. El diario Bild informó que la policía se llevó las computadoras que encontró en la casa del mandatario. El cateo lo llevaron a cargo cinco agentes judiciales esta tarde y duró mas de una hora, de acuerdo a las informaciones disponibles. Previamente, la Fiscalía de Hannover confirmó el cateo en las oficinas y vivienda de David Groenewold, cineasta y abogado, vinculado con Wulff. Groenewold al parecer invitó en varias ocasiones vacaciones pagadas al mandatario en un costoso destino turístico, luego de haber recibido favores por parte de Wulff. El lugar habría sido Sylt, isla alemana con reputación de ser uno de las áreas turísticas más caras del país. El próximo 18 de marzo, el Bundestag en Berlín elegirá al sucesor de Wulff. La prensa alemana realizó desde mediados de noviembre de 2011 detalladas investigaciones sobre las versiones sobre Wulff, y los eventuales regalos y favores. El disparador de las indagaciones fue el intento del presidente de acallar a la prensa con amenazas. Se trató en concreto del diario Bild. Wulff trató a toda costa de impedir que ese diario publicara un reportaje sobre un crédito obtenido en forma poco clara para construirse una casa. Quedó de manifiesto y comprobado que el presidente trató de amedrentar al diario con amenazas.