¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que cocinandoencasa escriba una noticia?
El calabacín es una hortaliza, venida del continente americano, de la que se comen su fruto y sus flores. Tiene pocas calorías, un sabor delicado y muchos nutrientes. La podemos comer de muchas maneras, como plato principal, como acompañamiento de otros platos, en cremas, etc...
Si nos decidimos por una receta en la que los vayamos a rellenar, podemos utilizar los calabacines alargados, pero los calabacines luna, o calabacines redondos, son ideales para realizar este tipo de recetas. Podemos rellenarlos con variedad de ingredientes.
Mientras, ponemos aceite en una sartén y añadimos la cebolla picada finamente, con un poco de sal, y dejamos pochar a fuego medio-lento.
Abrimos las latas de bonito, o atún, y lo dejamos escurrir.
Cuando los calabacines estén cocidos, los sacamos y quitamos el papel film con cuidado de no quemarnos. Los dejamos templar un poco y les extraemos la carne con una cucharilla limpiando bien las paredes, sin romperlas, y no quitando mucho en la base para que nos queden bien derechos. Vamos poniendo en un colador la carne de los calabacines y ponemos los calabacines boca abajo para que también suelten el agua.
Cuando tengamos la cebolla pochada, añadimos la carne de los calabacines a la sartén, para que se tueste un poco, dándole vueltas constantemente para que no se pegue. Salpimentamos y añadimos el bonito, o el atún, y lo vamos deshaciendo con un tenedor hasta conseguir que se mezcle todo bien. Añadimos el queso Mozarella y removemos hasta que se deshaga y mezcle bien.
Precalentamos el horno a 220ª
Rellenamos los calabacines con una cuchara y ponemos queso rallado por encima. Los colocamos en una fuente de horno y los dejamos cocinar 15 minutos. Pasado este tiempo cambiamos el horno a modo grill y doramos la parte superior.