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La selección de rugby de Nueva Zelanda, vigente doble campeona mundial, salvó el honor de los países del sur al ganar este sábado a Francia por 24-19, en una jornada de test-matches en la que perdieron Sudáfrica, Australia y Argentina ante rivales europeos.
Los neozelandeses supieron aguantar la ofensiva de los franceses con una estrategia minimalista, que resultó ser mucho más efectiva en el Estadio de Francia (afueras de París), en el cierre de los encuentros de noviembre para ambos equipos.
Los galos se pueden contentar con haber mejorado con respecto a la derrota de hace más de un año ante los neozelandeses, 62-13 en los cuartos de final del Mundial de Inglaterra 2015.
Francia pecó de imprecisiones en los últimos metros, sobre todo al principio del enfrentamiento cuando dominaban con autoridad a los oceánicos, como también hicieron en la derrota de la semana pasada frente a Australia (25-23).
Nueva Zelanda logró tres tries mediante Israel Dagg (7), Beauden Barret (43) y Charlie Faumuina (58), mientras que los galos solo consiguieron uno a manos de Louis Picamoles (62).
Francia desperdició tres ocasiones hasta el descanso, demasiadas para vencer a los 'All Blacks' que solamente han perdido un encuentro este año (ante Irlanda el 5 de noviembre), tras establecer un récord de 18 victorias seguidas que comenzaron en 2015.
Se trata del último encuentro que disputa Francia antes del inicio del Torneo de Seis Naciones, que iniciará ante Inglaterra el 4 de febrero.
- Récord de derrotas -
Sudáfrica sufrió su octava derrota en un año, superando así su peor marca, luego de perder contra Gales por 27-13 en el Millennium Stadium de Cardiff.
Hasta este momento, la selección sudafricana registraba siete encuentros perdidos en 1992, año en el que se puso fin al 'Apartheid' en el país.
Los hombres de Allister Coetzee, que venían de caer derrotados la semana pasada ante Italia por primera vez en su historia, recordarán el 2016 como un año negro en su historia.
Con la baja de su capitán Sam Warburtong, lesionado esta semana durante un entrenamiento, Sudáfrica acumuló muchas pérdidas de balón, sobre todo en el primer tiempo.
Además, se notó la ausencia del veterano Bryan Habana, quien no fue convocado por primera vez en un partido internacional por decisión técnica de Coetzee.
En la primera mitad, los galeses ya demostraron el dominio del juego pese a que todos los puntos fueron logrados por penales transformados (12-6).
Gales, bajo la batuta del seleccionador interino Rob Howley, terminó la gira mejor de lo que había comenzado con la derrota ante Australia por 32-8 y las victorias frente a Argentina (24-20) y Japón (33-30).
- Una exhausta Argentina -
Además Los Pumas perdieron ante Inglaterra por 27-14 en Twickenham, desaprovechando la temprana expulsión de un rival.
Los ensayos argentinos fueron obra de Facundo Isa y Santiago Cordero, mientras que, por Inglaterra, Jonny May anotó un try y Owen Farrell cinco penales y un penal try.
"Aprovechamos la superioridad en el juego, pero no en la definición. Hubo quiebres y posibilidades de try, pero no acabamos de marcarlos", dijo el seleccionador argentino Daniel Hourcade, refiriéndose al periodo que siguió a la expulsión de Elliot Daily.
Los argentinos llegaban exhaustos a esta cita, tras un largo año de trotar por el mundo, de Johannesburgo a Tokio, pasando por Londres y de vuelta a Londres, y venían de caer derrotados ante Gales y Escocia.
Con su derrota en Twickenham, Los Pumas perdieron la posibilidad de acabar octavos en el ranking mundial y estar en mejor posición en el sorteo del Mundial de Japón 2019, que tendrá lugar el 10 de mayo.
Por su parte, Irlanda venció a Australia por 27-24 con tres tries conseguidos por ambos selecciones. Dominados 17-0, los australianos esperaron hasta la hora de juego para remontar un encuentro que se le escapó al final.