El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, criticó a los cascos azules de la ONU desplegados en el sur del Líbano, una semana después de que uno de ellos, español, falleciera el miércoles pasado, víctima de bombardeos israelíes efectuados en respuesta a un ataque del Hezbolá libanés.

Los "soldados de la FINUL (Fuerza Interina de las Naciones Unidas en el Líbano) no informan sobre el tráfico de armas en el sur del Líbano", dijo Netanyahu en una conversación con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, según los servicios del primer ministro israelí.

Según Netanyahu, la FINUL, encargada de vigilar la frontera entre Israel y el Líbano, no aplica la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, adoptada tras la guerra israelí contra el Hezbolá en 2006.

Dos soldados israelíes murieron y siete resultaron heridos el miércoles en un ataque de Hezbolá. En represalia, Israel bombardeó varias localidades en el sur del Líbano, donde están establecidas varias unidades del Ejército libanés y la FINUL, causando la muerte del casco azul español Francisco Javier Soria Toledo.