Las supuestas transcripciones exculpatorias a las que parece referirse el ínclito y nunca suficientemente bien ponderado señor Camps, fueron obtenidas cuando los inculpados ya conocían la operación policial y por tanto; muy bien, podrían ser un montaje diseñado por los asesores jurídicos del elegantísimo; que en mi opinión, debería abstenerse de usar el término "montaje" cuando a estos asuntos se refiera.

Otra cosa que llama mucho la atención de la arenga "exculpatoria" del ilustrísimo, honorabilísimo, elegantísimo y muy leal don Francis Camps, es su afirmación: "Mi patrimonio personal no se a incrementado desde que accedí al cargo". Cosa que posiblemente encaje con la realidad contable de sus cuentas bancarias conocidas, pero que contrasta y mucho con la realidad, pues el detentar el poder del gobierno autonómico le proporciona dividendos personales, como por ejemplo el poder político, que obtiene gracias a los "supuestos favores" de sus adjudicatarios favoritos; por ejemplo, la propaganda electoral que consiguió gracias a al exposición "La faz de la eternidad" en Alicante; exposición que cuando fue criticada por su sonado fracaso de asistencia, el elegantísima defendió diciendo: "La exposición no le a costado un duro al contribuyente". Olvidando o queriendo hacer olvidar, que las empresas que subvencionaron dicha exposición son adjudicatarias de su "administración" y que, muy probablemente, de este modo le estaban pagando los "favores" recibidos, o sea, a él le pagan en "especie" las adjudicaciones inmerecidas y con presupuestos inflados para poder devolverle el favor, favores que su "administración" les concede a cambio de la propaganda que a su vez, lo favorecen a él, llevándolo a renovar su cargo.

Así pues; su patrimonio personal (El poder y el estar por encima de la ley) se ha incrementado gracias a las adjudicaciones a dedo, (Y trampas descaradas, como lo es fragmentar los contratos, para así, poder adjudicarlos a los "amiguitos del alma" sin pasar por la fiscalización de la hacienda publica) dicho incremento consistiría, precisamente, en el poder que detenta y que, según parece, ha comprado mediante favores hechos con los dineros de las arcas "publicas" (Entrecomillo publicas, porque en realidad las cuentas no están a disposición publica y por tanto son secretas, que es todo lo contrario que publicas); por cierto ¿De donde saco la ingente cantidad de dinero que gastó en su ultima campaña electoral? Quizás, de sus adjudicatarios favoritos, y si no fuera así ¿De donde sale y a cambio de qué favores, lo consiguió?

"Si aceptar regalos es cohecho, vamos todos los políticos al Supremo". Con estas declaraciones la alcaldesa de Valencia, doña Rita Barbera, equipara los regalos que reciben de forma pública y notoria los altos cargos públicos, con dádivas recibidas repetidamente y con opacidad, (Bajo manga) tal y como cita el auto judicial; señalando a todo su entorno, como beneficiarios de "favores" empresariales no ajustados a derecho.

"Es un tema de tres trajes, no de adjudicaciones irregulares en la administración autonómica o de financiación irregular del Partido Popular". Don Francis Capms

"Es un tema de tres trajes, no de adjudicaciones irregulares en la administración autonómica o de financiación irregular del Partido Popular". Estas declaraciones de don Francis Camps; parecen venir ha confirmar su receptación de vienes provenientes del saqueo de los presupuestos de la Comunidad autónoma.

La obstrucción a la renovación de los órganos de gobierno de los jueces, hasta alcanzar su meta, que no era otra cosa que imponer el actual CGPJ viene a explicase ahora, cuando vemos al, prácticamente único, juez que ha perseguido la corrupción institucional tardofranquista, apartado de sus funciones precisamente por quienes han sido "colocados" mediante el incumplimiento de una ley manada del parlamento español, por los corruptos para que los encubran; cuando además y viniendo a reforzar dicha impresión, el actual presidente del CGPJ luce su altura intelectual y moral con frases como: "Los integrantes del CGPJ no pueden prevaricar" y en mi opinión, dicha frase viene a querer decir: "Yo soy la ley"; cosa que no extraña oír de su boca.

Es bien curioso, que quienes proclaman la libertad de mercado y la ausencia de regulación del mismo, como grandes paradigmas que han de salvar al mundo de todos los males, distorsionen este mercado con sus marrullerías en beneficio propio; por esto, creo que algunas autoridades de este país, olvidan que siempre deben conservar la apariencia de estar cumpliendo la ley; sobre todo y espacialmente cuando no la cumplen.