¿Quieres recibir una notificación por email cada vez que Internacionales escriba una noticia?
El presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, afirmó hoy que aún considera al Parlamento Centroamericano (Parlacen) una “cueva de ladrones”, pese a haber enviado al Congreso una ley para reincorporar al país a ese organismo. “Todavía no la he cambiado, sigue la misma opinión, pero soy un presidente que tengo que hacer cumplir la ley gústeme o no me guste. Los presidentes siempre tienen que cumplir la ley”, dijo Martinelli a periodistas. El mandatario reaccionó así ante el supuesto viraje de su posición de hace unos tres años, cuando calificó al Parlacen como “cueva de ladrones”, en medio de su intención por retirar a Panamá del organismo. El Consejo de Ministros de Panamá aprobó el martes pasado un proyecto de ley para permitir la reincorporación del país al Parlacen, en virtud de un fallo judicial de principios de año, que calificó de inconstitucional la salida del organismo en 2010. La propuesta enviada al Parlamento restablece la vigencia de leyes relacionadas con la participación de Panamá en el brazo político de la integración centroamericana. En enero pasado, la Corte Suprema de Justicia declaró inconstitucional una ley impulsada por Martinelli para sacar a Panamá del Parlacen. Una docena de diputados panameños pertenece al Parlacen, aunque en una decisión polémica adoptada el mes pasado, la junta directiva del órgano regional aprobó las credenciales a dos diputados, sin tener el aval del Tribunal Electoral (TE). De acuerdo con opositores, los legisladores consiguieron ser acreditados debido a que el gobierno panameño se comprometió a pagar una deuda de 3.7 millones de dólares al Parlacen. Opositores acusan que Martinelli decidió reincorporar al país con el fin de obtener inmunidad cuando abandone su cargo el 30 de junio de 2014. Pero el mandatario afirmó que “es un requisito que tenemos que hacer para poder ser parte de la comunidad centroamericana. Es un requisito que por ley la Corte Suprema y el Tribunal Electoral me han dicho que tenemos que hacer”. “No acepto ninguna inmunidad, ni me va ni me viene”, insistió Martinelli.