El año se fue demasiado rápido, más rápido de lo que le hubiere gustado a la mayoría y esto no termina siendo una idea exclusiva de los conspiranoicos.

El hecho de que se haya ido otro año más no significa que el tiempo se agotó y que no cumpliste con tus objetivos trazados desde tiempo atrás.

Hay que destacar que cada quien tiene un tiempo en específico para cumplir sus propias metas por el simple hecho de que cada quien es diferente en personalidad, disciplina, capacidad de aprendizaje y otros que tengan que ver con lo que es ser humano.

Por esto, no deberías sentirte mal si intentaste sin rendirte aun si todo parecía perdido (no importa desde cuando se hayan establecido dichas metas) y no cumpliste satisfactoriamente para llegar al objetivo.

Retos y oportunidades

Por que mientras tengas vida para realizar esos propósitos pendientes será en esa función que esos propósitos se llevarían a cabo y nada está perdido; además, hay que tomar en cuenta si no te has rendido, es el doble de oportunidad que tendrás.

En fin, hay mucho que se puede decir sobre el tiempo medible y sus consecuencias junto con los efectos colaterales en nosotros.

2020 se ha ido demasiado rápido y después de pasar tantas peripecias, pareciera que la normalidad acecha. Sin embargo, lo aprendido no dejará que te confíes y te halles desprevenido.

2021 es el inicio y reinicio, para algunos y para otros aun no llega la fecha límite según sus estimaciones, de retos que te harán más fuerte.

Como el 2020 te ha puesto a reflexionar durante mucho tiempo en lo que nadie había pensado, hubo un recuento de daños que te pusieron a prueba y el 2021 te ve más fuerte que ayer.

Deseamos que hayas llegado a las metas establecidas y, en dado caso, que sigas el camino para cumplir esos propósitos con mucho éxito.

¡Un abrazo!